Etiquetas

kenia (78) otros autores (14) :) (11) fotografias (11) música (5) películas (2) chistes (1) curiosidades (1) esad (1) quotes (1) runner (1)

lunes, 4 de julio de 2011

sonreir con el hígado

Hay cosas que me hacen sonreir por dentro, me hacen sonreir con la memoria, el cerebro, y mis musculos se relajan.
Hay cosas que cuando las veo me hacen sentir como si me dieran un abrazo aunque nadie me este tocando fisicamente, supongo que son esas cosas las que te tocan emocionalmente.
Hoy estaba afuera de una fruteria, y al lado había una casita, de la casa salieron 3 niñas de aproximadamente 4, 5 y 7años, todas recien cambiaditas y peinadas con una cola de lado, -como las que me hacía mi mamá-, y se sentaron en la bardita de la casa donde había un pequeño jardín, entonces salio un señor que por su aspecto concluí que era el abuelo, sacó un mango y un cuchillo, y les dijo con una seña que no le dijeran a su mamá, supongo que era porque las acababa de cambiar y se podían ensuciar. El "abuelo" empezo a partir rodajas del mango y les dio una a cada niña, y otra para el y se sentaron ahí a comer mango y ver la vida pasar, sentir el viento y ser testigos de lo nublado del día.
Eso me hizo sentir como si yo fuera la cuarta niña, me acorde de mi abuelo y curiosamente parece que todos los abuelos de personas nacidas en los 70's, 80's tenian siempre navajas, cuchillos ó ese tipo de cosas en sus bolsillos.
Esas son las cosas que te hacen recordar a una persona, los momentos que compartieron, lo que te enseño, sobretodo si te enseño a disfrutar porque generalmente nos enseñan a cuidarnos y en eso van implicitos muchos miedos, mi abuelo por ejemplo me enseño a disfrutar de los dulces, a disfrutar simplemente estar sentada, de hecho fue mi abuelo quien me enseño sin querer a ahorrar, recuerdo que él tenia un frasco enorme donde guardaba monedas y a mi se me hacía tan importante y magnífico ese frasco, yo quería tener el mio.
Curiosamente mi abuelo y mi papá tenian cosas en comunes aunque este hablando de mi abuelo materno: a los dos les gustaba bailar, a los dos les gustaba tener sus frases, los dos tenian un humor distinto a la mayoria de las personas que conozco, los dos tenian su genio, y los dos tenian ese raro don de caerle bien a la gente a pesar de sus ocurrencias.
Asi que hoy hice un viaje a mi infancia, regrese con una sonrisa, y con ganas de disfrutar como me enseñaron 2 hombres muy importantes en mi vida.